El aire pesaba en La Plata mucho antes de que sonara el primer arreglo. La humedad era densa, casi sólida, y el Servicio Meteorológico Nacional ya había lanzado la advertencia que obligó a mudar el escenario al sector «Bajo Tribuna» del Estadio UNO. Pasadas las 00:30, las luces se apagaron y la tensión acumulada estalló: Peces Raros, la banda fundada por Lucio Consolo y Marco Viera aparecieron en escena, uniformados con camperas de cuero y anteojos oscuros, listos para pilotear una nave que parecía a punto de despegar.
Lo que siguió fue una experiencia sensorial envolvente, donde el piso parecía volverse de goma ante la vibración de los graves. Con una estética sonora que recuerda a unos «Chemical Brothers» rioplatenses, el dúo arrancó un setlist demoledor con «Desaparecer» y «Frecuencias«. La intro, totalmente a oscuras y cortada por destellos de flashes blancos y rojos, marcó la pauta de una noche donde lo visual jugó un rol tan importante como lo auditivo, con pantallas proyectando rostros fragmentados y humo blanco inundando el ambiente.
Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Mientras afuera se desataba una tormenta indomable que anegaba las calles aledañas al estadio, adentro se vivía una realidad paralela y blindada. El «pogo» no era el tradicional choque de cuerpos, sino una marea humana rebotando al unísono, empujada por un punch sónico que pegaba directo en el pecho. El techo vibrante del bajo tribuna actuó como caja de resonancia perfecta para clásicos como «Cicuta» y los nuevos himnos de Artificial.

Pero Peces Raros no olvida su adn. En medio de la vorágine electrónica, temas como «No van a parar» sirvieron de recordatorio de su tracción a sangre: ambos músicos pelaron las guitarras para solear, inyectando la dosis de rock necesaria para cortar la atmósfera sintética. Fue el momento más orgánico de la noche, demostrando esa capacidad única que tienen para transitar la delgada línea entre la banda de estadio y el dúo de club nocturno.

El show funcionó como la despedida ideal antes de su extensa gira por Europa. Tras haber transitado uno de los mejores años de su carrera, con presentaciones en Estados Unidos y Latinoamérica, el regreso a la ciudad de las diagonales tuvo sabor a consagración. «Vos me vas a matar esta noche», se escuchó, y la frase resonó como una profecía cumplida ante una multitud local que celebró la evolución arrasadora de sus referentes.
El final del recital dejó al público en un estado de euforia suspendida. La lista de temas, que recorrió desde «Barrio Adentro» hasta «Clericó«, fue un viaje quirúrgico por su discografía. Fue una noche donde la lluvia y la música compitieron en intensidad, pero donde el «formato full banda» de Peces Raros terminó imponiendo sus propias condiciones climáticas.
Cierre de lujo y la historia de una evolución constante
El broche de oro de la sexta fecha del ciclo Noches Capitales estuvo a cargo del DJ francés Rafael Cerato. El europeo tomó la posta de una pista caliente y brindó un set elegante y atrapante, manteniendo la energía arriba para coronar una velada colmada de electrónica. Su presentación sirvió para extender la fiesta en uno de los ciclos primaverales más convocantes de la escena actual.
La noche en UNO fue también la ratificación del camino recorrido por Consolo y Viera desde 2014. Aquel proyecto que comenzó como algo más cercano al rock en el circuito autogestionado de La Plata supo transformarse radicalmente, abrazando los sintetizadores y las texturas electrónicas hasta consolidar un sonido propio. Con discos bisagra como Parte de un Mal Sueño y Dogma, la banda pasó de los festivales locales a llenar el Luna Park y Obras.
Este presente brillante llega respaldado por el reconocimiento de la industria. Nominados a los Premios Gardel por Dogma y Artificial, y recientemente galardonados con el Diploma al Mérito en los Premios Konex, Peces Raros se estableció como una de las propuestas con mayor proyección de la música en español.
TC

APORTA TU COMENTARIO